miércoles, 17 de abril de 2024

HAIKUS DE REMEMBRANZA (Por Sántos Vibot)

HAIKUS DE REMEMBRANZA

 

 

No sé vosotros, queridos amigos, pero yo, aun después de los días transcurridos desde nuestro reencuentro, sigo con el Himno a la Virgen del Camino rondándome y ronroneándome en la cabeza… y me envuelve a cada paso del día. Y de la noche a veces: 

 

"…Reina de la montaña…" 

 

y no sólo ese imponente coro wagneriano de peregrinos suntuosamente arropado entre ráfagas de órgano, sino cada una de sus inolvidables y entrañables estrofas. Las siento en mi cabeza y vuelvo a verme con pantalones cortos cantando entre los tiples y rodeado de todos vosotros, aquellos casi quinientos muchachos que cantábamos “Ave María estrella del camino…" en aquel flotante coro junto a la vidriera sinfónica …

 

Y me pasa lo mismo con cada una de las piezas y poemas que interpreté para vosotros y que había preparado con tanto embeleso desde el anuncio de nuestro reencuentro.




Acaso algo de todo ese embeleso os transmití ese atardecer.

He pensado por ello condensar en un haiku cada remembranza como en un nuevo encuentro en la penumbra de aquel coro de sueños en torno al órgano, ámbito confidente y sosegado. Tal vez entre ese ritmo japonés escandido de 5-7-5 sílabas -con el cercano aroma de nuestras españolas seguidillas- quede, alto en el aire como un viejo perfume vaporizado, pero aún fresco y vibrante, el recuerdo de aquella comunión:

 

 

 

 

1.- Fanfarrias de oro

     Para abrir un concierto 

     Junto a vosotros

 

Truena Quevedo

Sonetos metafísicos

Y enamorados:

 

En donde ardía 

Dejará la memoria, 

Ebrio firmó.

 

Ayer se fue;

Mañana no ha llegado,

Hoy se está yendo…

 

Sabias palabras:

Soy un fue, y un será,

Y un es cansado…

 

Afán ansioso

Mas polvo enamorado:

¡Oh sí, por siempre!

 

 

2.- Poesía mística:

     Juan de la Cruz suspira,

     Cabezón tañe.

 

Sobre las teclas

Tan alta transparencia

Mece el oído.

 

Rompe la tela 

De este dulce encuentro:

Cauterio suave.

 

¡Secretamente,

Cuán manso y amoroso

Tú me enamoras!

 

 

3.- Los organistas

     De aquellos verdes años

     Vuelven en música:

 

Uría ríe 

Mientras nos acompaña.

Pedro suspira.

 

Rueda, Elustondo,

Bregón, Olóriz, Seque

Tejo, Vibot…

 

Manuel Esteban 

Y Víctor Pablo Pérez…

¡Cuánta harmonía!

 

Brincan fuguetas 

En el órgano mínimo 

De los pequeños:

 

Haendel y Mozart

En tan tiernos oídos:

Caleidoscopios.

 

¡Cuánta alegría 

En tan tiernos pesares

Oíros tocar!

 

Banco del órgano 

De la escuela mayor:

Los "Cantos íntimos".

 

Eduardo Torres:

Nostalgia adolescente,

Amor prohibido.

 

García Baena:

Ese antiguo muchacho

Que aún llora versos…

 



 

4.- ¡Oh la Rondalla:

     Los élitros vibrátiles 

     De las libélulas!

 

La sinestesia

De Rimsky Korsakov,

Iridiscente…

 

 

 

Y aquella música 

Que descendía del cielo

Entre suspiros:

 

La "Canción india"

Como un anhelo siempre 

Inalcanzable.

 

 

 

Pablo Baena

"Bajo la dulce lámpara":

Secreta dicha.

 

Y Eduardo Torres,

Su "Canción elegíaca":

Viajes soñados.

 

 

5.- Correa de Arauxo

Junto a Lope de Vega:

Tan honda estela.

 

Tientos de bajo:

Tan amargos sonetos

Desesperados.

 

Llamar eterno 

a lo que es temporal.

Fuego en el alma…

 

Beber veneno 

Por un licor süave,

Amar el daño.

 

A un desengaño 

Dar la vida y el alma:

Esto es amor…

 

 

6.- Amor sin vuelta, 

     Ni nombre, ni palabra,

     Ni carta blanca.

     

Góngora esbelto:

El mundo de los sueños

Bien lo cifraste:

 

Hondo en la noche

Su teatro sobre el viento:

Sombras de dicha…

 

Villamediana:

"El que fuere dichoso

Será amado…"

 

Amo de vos

Lo que de vos entiendo,

No lo que espero,

 

Pues nada espero.

De vos no quiero más 

Que lo que os quiero.

 

 

7.- Mi ruiseñor…

     Shakespeare, Quevedo, Keats…

     Y Juan Ramón.

 

 

Lucero en trino:

¡Qué rosa hecha harmonía 

En tu garganta!

 

Gabriel Miró:

Entre "El humo dormido"

Aquello ojos…

 

En nuestra mente

La ciudad sumergida

Que nunca duerme.

 

Emerge el órgano 

Chorreando visiones

De tiempos idos…

 

 

8.- Fugacidad:

     Al arrullo de Góngora 

     Cantan zagales.

 

Antonio Mestres:

Tocatas pastoriles 

De cornamusa.

 

"¿Qué hará la mano

Si tanto puede el pie

Que ostenta flores?"

 

Pues más me enredo, 

-Sutil Lope de Vega-

Mientras me guardo…

 

9.- ¡La Españoleta

     Venza a la blanca nieve

     Y todos dancen!

 

 Oro bruñido

El sol relumbra en vano

Por tu cabello.

 

¡Rubio tesoro

Goza, goza el color,

La luz, el oro!

 

Que en tierra, en humo,

En polvo, en sombra, en nada

Todo se olvida.

 

 

 

Poesía de ocasión ha sido ésta, sólo para vosotros. Intraducible, íntima, para uso privado. Confidencial, cercana quise hacerla, compañeros queridos del colegio.

Sortilegio del canto entre vosotros, entre tantas quimeras de entonces y de ahora.

 

26 comentarios:

Ramón Hernández dijo...

Querido amigo Santos: va a ser cuestión de ponerse a buscar como loco una vacuna eficaz contra esta epidemia tuya de hacernos caminar por los aires y abrirnos las puertas de los cielos, pues contagia en serio una bondad acaparadora que se sirve, ahí es nada, de la música, el canto y la poesía. Algo parecido viví una vez en el cuerpo de un amigo, pero que tenía que ver con los cuernos de los toros. Él mismo me contó, y yo hice crónica de ello, que su afición a correr delante de los toros era tal que hubo días en que, no teniéndose de pie por la mañana, presa de la fiebre, en cuanto llegaba la tarde y había algún festejo taurino popular cerca, su cuerpo se transformaba por completo y allá que lo teníamos corriendo como una gacela delante de los toro. Yo no lo sé (sabéis que padezco un agudo síndrome de la zorra de las uvas verdes), pero es posible que a mí esa cara oculta de la vida, donde tantos milagros y prodigios ocurren cada día, se me esté desvelando en el recuerdo vivo de un puñado de "jóvenes" empeñados en construir, repito, un nuevo Santuario de la Virgen del Camino virtual con este blog, revelación que cada día se transforma en una intensa oración de amistad y fraternidad. Gracias, Santos, por una labor tan decisiva como la tuya para la construcción de este nuevo Santuario.

Vibot dijo...

Ay , Ramón, no conociste tú aquellos primeros años de este blog -si no lo has hecho ya echa un vistazo- cuando hasta la más corta entrada, tuviera el carácter que tuviera, era secundada al momento por un torrente de respuestas que a su vez provocaban nuevos diálogos de empatía y simpatía suma.
Y si había desacuerdos, igualmente brotaban argumentos y donaires…

Fernando Alonso Diez dijo...

Pero mereció la pena, todo ha merecido la pena. Se trataba de una conmemoración muy especial para todos nosotros y tú, Santos Vibot, agarraste el toro por los cuernos y pusiste corazón y vida en el empeño, apostando fuerte y sorteando dificultades.
El Santuario lucía y sonaba a fiesta mayor. El repertorio nunca olvidado, desde los primeros acordes del órgano, volvió a conmocionar nuestros sentidos y sentimientos como si se tratara de un volcán a punto de erupción. La misa, el himno, la despedida… Y por la tarde noche el regalo, para tus compañeros, de ese concierto que con tanto esmero habías preparado.
Aquella noche me hubiera gustado acercarme para darte un abrazo y repensar lo vivido. Habrá ocasión.

Anónimo dijo...

Gracias por enseñarnos esa poesía que bien podría ser privada.
Por esos sentimientos fechados. Por el lirismo de lo esencial.
Como poeta contumaz y,como poeta necesario. Como compañero que
hace recuento de tiempos aquellos que irreversiblemente vamos perdiendo.
Se agradece la selección que nos regalas. Muy buena elección.
Saludos.

Anónimo dijo...

El anónimo es Federico Esteban Monasterio

Francisco Javier Cirauqui Armendariz dijo...

He de decirte que tu concierto de música y poesía no solo me embelesó, sino que me hizo levitar. El sonido del órgano y los poemas que tanto amo, me llevaron y me trasportaron a <aquellos momentos vividos en la Virgen del Camino, sobre todo en el coro,, envueltos en colores por los reflejos de l<a vidriera de Rafols y me hizo recordar la Oda de Fray Luis de León a Francisco Salinas:

"El aire se serena
y viste de hermosura y luz no usada,
Salinas, (Vibot), cuando suena
la música estremada
por vuestra sabia mano gobernada.
A cuyo son divino
el alma, que en olvido está sumida,
torna a cobrar el tino
y memoria perdida
de su origen primera esclarecida"
Al leer estos haikus me he sentido embargado y arrobado y he parafraseado a Machadfo en sus proverbios y cantares:

"Yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles,
como pompas de jabón
de los versos de Vibot"


Gracias por estos regalos tan emotivos, sinceros y maravillosos.

Vibot dijo...

Querido Fernando, gracias, sí que eché de menos esos abrazos al final del concierto.
Y en cuanto a sortear dificultades, no hubo muchas, y sí mucha ilusión de comunicarme con vosotros y mucha colaboración de Kike, de Rey, de Lorente, tuya… sólo una pequeña espina: mi empeño en que la tercera estrofa del Himno, “Madre de amor inmenso…" a tres voces iguales, fuera cantada por tres de vosotros fue una dificultad que no pude sortear a pesar de insistiros…
En cuanto a repensar lo vivido, es lo que he intentado en esos haikus, repensar, revivir…

Vibot dijo...

Querido Federico, creo que no viniste, al menos no te vi.
La poesía privada es sólo soledad, por eso la comparto con vosotros. Y que me devolváis sus vibraciones en vuestro corazón sí que es más y mejor.
Gracias por el abrazo de tus elogios.

Vibot dijo...

Querido Cirauqui, tú siempre me abrazas con tu espontánea y generosa sinceridad. Yo también levitaba declamando para vosotros allí, precisamente allí…¿no me sentíais embelesado y en plena levitación en esos textos de oro? Sólo el miedo a que se os hiciera largo me hizo precipitarme en algunos de ellos, lo veo ahora al revisarlo.
Y sí, traté de serenar el aire y de vestirlo de hermosura y luz no usadas, jajaja Y en cuanto a los mundos sutiles, ingrávidos y gentiles…son mis favoritos.
Un abrazo, muchacho.

federicoesteban monasterio dijo...

Estimado Vibot:
Yo también siento el no poder ir.
Ninguna de las dos reuniones pude ir.
La primera coincidió con la boda de mi hijo, y esta
por dos motivos: el primero por que..., y el segundo por que...
Pero eso no quita de que siempre estaré con vosotros.
Abrazos

Ramón Hernández dijo...

Gracias, Vibot, por tu elocuente y hermoso despliegue de generosidad en tantos ámbitos. Lo de "repensar lo vivido" me resulta muy potable a condición de que no quede en mera delectación mística y sirva como soporte o cimiento para seguir construyendo. Debemos convertir el pasado en fuente y mina del futuro. Por lo demás, me pregunto si habrá algo más "sutil, ingrávido y gentil" que el Santuario virtual de la Virgen del Camino que entre todos estamos construyendo, aunque el ritmo actual de trabajo sea lento. Miro la Sagrada Familia de Gaudí y me conformo y animo. Antes o después, lo conseguiremos, pues al blog le quedan por lo menos, me parece a mí, otros 17 años de vida activa, constructiva. Gracias por el paseo museístico que me reporta la lectura de todos los comentarios.

JOSÉ MANUEL GARCÍA VALDÉS dijo...

Si alguien se tomaba a broma lo de la mística del P. Arintero aquí tiene la prueba de que la cosa iba en serio, en esta entrada de Vibot yo veo, siento, una elevación que, él llamará poética, pero perfectamente se la puede considerar mística, designando un tipo de experiencia difícil de alcanzar y supone el grado máximo de elevación del sentimiento.
Algunos, yo en particular, aún estamos en la parte primera de la primera parte en esto de alcanzar la elevación espiritual, estamos en la fase propedéutica, de preparación, otros,, pocos, y ese parece tu caso, amigo Vibot, ya estáis en la tercera parte de la última parte en lo que a elevación psicoespiritual se refiere. Para Arintero la mística hace referencia a la contemplación, la iluminación y en la segunda cuestión que plantea dice que la contemplación
es asequible a todos los que la buscan sinceramente, no parece mi caso pero sí el tuyo. Ya sabemos que el de Lugueros habla de contemplación espiritual, religiosa, aquí yo veo la contemplación estética y sentimental.
¿De qué hablaba? De cómo el P. Arintero, de La segunda cuestión se pregunta si la contemplación es asequible a todos los que la buscan sinceramente. Respondiendo a esta cuestión Arintero identifica la contemplación con esa sabiduría de la que habla la Escritura. Se trata de esa sabiduría que se deja encontrar fácilmente de quienes la buscan y la aman. Esta sabiduría, que es el principal don del Espíritu Santo y el que más propiamente nos hará contemplativos y místicos, debe ser preferida a todo lo demás. Esta sabiduría se ofrece a todos sin excluir a nadie, ni a sus enemigos más declarados.
El mensaje que quería lanzar es que, de algún modo, el P. Arintero se ha hecho bloguero, su espíritu revolotea, se siente. Creo que los que aquí se asoman están en el camino de alcanzar cierto grado de elevación sino mística sí estética y sentimental. Tu concierto melódico-poético nos aupó un poco más en esa ascensión.
Decir que José Mari, sin quererlo, se ha hecho responsable de que todos progresemos y lleguemos a la experiencia mística-humana.
Abrazos cuasimísticos.

Fernando Alonso Diez dijo...

Disertación tardía, pero oportuna y muy bien trabada, la que JM ha colgado en este BLOG. Traída muy a propósito del homenaje en sí, pero también del mismo homenajeado.
Observo que JM ha reflexionado profunda y acertadamente sobre ese "contemplata" dominicano, de la mano de su indispensable P. Arintero.

Vibot dijo...

¡Si es que te tengo que querer, Pitu, querido Jose Manuel astur de mis levitaciones!
Eso es lo que pretendí sin saberlo bien. Que os elevarais conmigo a tanta belleza como me embriaga desde entonces de entonces en aquellos bancos de la escolanía, haceros partícipes de ella, de tantos matices, colores, olores, sabores, conceptos…músicas acordadas, sobre todo la música y la poesía, tan polisémicas que son inagotables en sugerencias y caminos que se bifurcan, en sentimientos nunca olvidados pero tan de ahora mismo, sí, Ramón, fuente y mina de futuro. No anclaje en un pasado sin salida.
El que abriéramos allí, en aquellos sesenta, tan nacionalcatólicos y aún así prodigiosos, los ojos del alma a la belleza, al pensamiento, a las dos cosas juntas, incluso a la mística, aún ilumina nuestras vidas, nuestro camino, a veces tan asendereado.

No sé que removí en vosotros, os sentí entregados y eso me hizo rendirme mucho más. Veo en el vídeo vuestras cabezas inmóviles, levantadas a mi decir, a ese órgano que es a la vez un conjuro y un ventanal de vuelos que toca el subconsciente y que efunde alegría y misteriosos ámbitos del alma.

Fue un inmenso placer compartir todo esto con vosotros.
Aunque:

Entreme donde no supe
y quedeme no sabiendo,
toda ciencia trascendiendo.

Y las otras ocho estrofas impagables de San Juan de la Cruz.

Ramón Hernández dijo...

¡Joder, auxilio, socorro, querido amigo JM! ¡Vaya panorama! ¿Por qué? Cuando ya me queda poco de vida (supongamos que como máximo 20 años, hasta los 104, jajajá), estoy atravesando la zona más opaca de la "noche oscura", de la que todavía me quedan horas o un largo trecho de túnel, como para aspirar a iluminaciones siderales o místicas. Lo referido a la edad no tiene valor en sí, salvo que las neuronas, que son las que contemplan, ya huyen en desbandada, a tal ritmo que mejor será ir olvidándose de una larga senectud, y además "contemplativa". Lo normal, aunque sea descarnadamente prosaico, será poder controlar los esfínteres y evitar en lo posible dar quehacer a quienes están alrededor. ¡Ay, Arintero, Arintero, qué cosas nos planteas tú, que metiste fuego en la mente de Unamuno, en este mundo nuestro, tan saturado de neuronas corroídas, quería decir de "alzhéimeres"! (¡Si sabré yo de la cosa, pues llevo más de treinta años metido en ese charco!). En resumen, cada mochuelo a su olivo y nosotros, a nuestra honrosa y gloriosa tarea de construir, aunque sea a lo Gaudí, este santuario virtual nuestro, sin contemplaciones ni gaitas, pero eso sí, con el espíritu en los cielos y las manos en la tierra. O al estilo de nuestro insondable Vibot, aporreando como si tuviera alguna culpa un pobre piano, mientras a los sentimientos les van creciendo las alas.

Jesus Herrero Marcos dijo...

Qué se puede decir después de lo que ha dicho Pitu?

Francisco Javier Cirauqui Armendariz dijo...

José Manuel:

Mereció la pena esperar a tu disertación. Me estoy pensando leer al P. Arintero, aunque pensándomelo bien prefiero leerte a ti. Me tienes obnubilado con tus disquisiciones místicas, paso de la ascética, prefiero levitar por esos parajes ingrávidos y gentiles como pompas de jabón. Gracias Pitu.

JOSÉ MANUEL GARCÍA VALDÉS dijo...

Voy dar alguna explicación y aclaración.
Aclaración: A nadie le disgusta un chute de autoestima, me incluyo, pero este "portillo" es DE y PARA Vibot; es el portillo en el que su hace falta decirle dos cosas, como por ejemplo: que no tiene ni idea ni de música ni de poesía, se le dice si hubiere valor y motivo; no hay ninguna de las dos. Y si hay que decirle que es guapo, alto, rico e inteligente, se le dice incluso sin motivos.
Explicacion: Más de uno se preguntará de dónde coño le viene al de la Aldeona el interés por Arintero. Tiene dos causas formales y otras tantas materiales y finales, eficientes solo una, el menda. La primera causa viene de cuando los "enjuagues" de las Caldas. Éramos un grupo de "enjuagadores" habituales: Joaquín Bandera, J.M Represa, Roberto Sandoval, Julián Ruano y ego, me,mei. Una o dos veces por semana pecábamos entrando en habitación ajena para dar cuenta de algunos chorizos, quesos, lomos, "casadiellas", etc., etc.
Entre bocao y bocao leíamos y comentábamos la obra de Arintero, éramos fanáticos de la mística, no hay más que ver nuestras trayectorias. Ahí está la causa material y formal, la final no estaba. Nos desinflados de la mística pero Arintero y sus cuestiones ahí seguían.
La segunda causa he buscarla en el grupo de intelectuales de la Gran Aldea que, un buen día, sin saber yo porqué, decidieron organizar un Simposium, para los de la LOMLOE, Simposio, que iba a girar precisamente sobre la obra de un dominico, allí había alguno de esa casta, y eligieron al P. Arintero. Como figura central invitaron al hijo de unos emigrados del pueblo, quizas os suene, se llama GOOGLE, Ambrosio GOOGLE. Tiene una memoria mayor que la de los Javieres de la del 59, y sabe algo más que yo, no mucho más. Personalmente no sé ná de Arintero pero ese vecino citado lo sabe todo y de esos polvos estas tontás que yo escribo.
Supongo que más de uno quedará desilusionado porque pensaba lo mucho que yo sabía, ahora ya sabéis que sólo se que no se ná.
Abrazos y, repito, este portillo tiene amo.

José Ignacio dijo...


Aquel órgano,
Aquellas voces,
Aquella rondalla,
Aquellas guitarras,
Aquellas notas aladas...

Vibot,

Paz en las mañanas oscuras.

Si en hoy a la mañana no hay mañana.
Si hoy no veo puerta ni ventana.
Si me duele el respiro porque mana
muy dentro el dolor que me acompaña.

Si todo es negro del color de aquella pana.
Si no puedo ni esperar ni luz lejana,
ven, guitarra, ven con el viento en la mesana.
Ven y dame la caricia que me sana.























Vibot dijo...

Una abrazo, José Ignacio, tú siempre me lees con mucha empatía y me mandas cariños. También te los mando yo.
Nada hay mejor que paz y sosiego en esas mañanas oscuras que todos tenemos. Y un poco de poesía o música que acaricien nuestro desvalimiento.
Cuídate bien.
Aquí seguimos todos.

Vibot dijo...

Pitu, que en los portillos no hay amo, jajaja

Vibot dijo...

Aunque echo de menos a algunos de vosotros en este portillo. Mucho.

JOSEÉ MANUEL GARCÍA VALDES dijo...

Cómo que no, en mi pueblo el dueño del prao es el que abre y cierra el portillo/a.
Yo me entiendo, quizás no me explique.
Abrazos.

Vibot dijo...

Pues si la autoridad incuestionable del Pitu-Valdés me ha investido amo de este portillo\a\e, no seré yo quien venga a contradecir a ingenio de tanto donaire y agudeza de conceptos y gracias.

Así pues, como amo vuestro que soy aquí en este prado verde y florido os conmino a que sacudáis toda estéril indolencia y pereza de espíritu y seáis generosos escribiendo. Yo bien lo fui poniendo el corazón y hasta el alma contando sílabas, acentos versales y hasta alguna rima tantas veces para regalaros.
Que cada cuál tenéis vuestra chispa y esa es única y todas enriquecen y embellecen el tan jugoso prado no sólo de este portillo, sino de este blog. Si hemos homenajeado con nuestra presencia y sentidas palabras y cantos a su mantenedor y querido e insustituible Josemari continuemos regando este huerto fecundo...
Obras son amores y no buenas razones solamente.

¿Se me ha subido la investidura a la cabeza?

JOSÉ MANUEL GARCÍA VALDÉS dijo...

No me parece que tengas ese perfil, más bien creo que te has quedado con el no voto de la humildad. Puedes presumir un poco, sólo un poco, la esencia se da en dosis pequeñas.
Más abrazos

Vibot dijo...

Acato la reconvención.
Seguiré mi canto llano y no me meteré en contrapuntos, que se suelen quebrar de sotiles, como acuñó Cervantes en el retablo de Maese Pedro de su Don Quijote. No me meteré en dibujos y haré lo que maese Pitu me manda o he creído entenderle:

"Llaneza, muchacho, no te encumbres. Que toda afectación es mala."

Estaba, ahora que soy amo y servidor de un portillo, por recostarme en el diván psicoanalítico de Ramón, o de Baldo, o de Cícero, o de Tejo, o de Javivi…o de todos vosotros, perezosos criptolectores silenciosos…pero si no me dais el pie…

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