viernes, 19 de abril de 2024

CRONICA DEL RECUERDO PERDIDO Y HALLADO EN EL BLOG.- PRIMERA PARTE.- (Por Javier Cirauqui)

Querido José Mari:

 

Iba a escribir la Crónica del Encuentro, pero he preferido enviarte esta "Crónica del Recuerdo perdido y hallado en el blog" Si lo crees conveniente lo publicas. Constará de tres partes. Está escrito a vuela pluma y pensando en algunos recuerdos que recuperamos con el blog de José Mari y el valor que tiene, por habernos reunido después de tanto tiempo y habernos recuperado nuestra infancia y adolescencia. Aquí van mis recuerdos con todo mi cariño y amor de que soy capaz.

 

Espero no os aburran. En estos versos distendidos quiero expresaros mis recuerdos sin ninguna pretensión.




 

CRONICA DEL RECUERDO PERDIDO Y HALLADO EN EL BLOG.- PRIMERA PARTE.-

 

El blog de Antiguos Alumnos 

de la Virgen del Camino,

del Camino de León.

Nació el año dos mil siete,

para la preparación

del encuentro celebrado

al cincuenta aniversario

para la inauguración

de este nuevo santuario,

Padre Curro, Subirachs,

de la Virgen del Camino, 

del Camino de León

Siendo gran iniciativa,

de José Mari Cortes

que lo ha cuidado y mimado,

hasta este mismo momento

con cariño y con placer

y algún sinsabor también.

 

Este blog que nos ayuda

a volver a recordar,

recuperar la certeza

de todo lo que vivimos

 en la Virgen del Camino, 

del Camino de León. 

 

El día de hoy celebramos

la existencia de este blog

y homenaje merecido

a José Mari Cortés.

Después del aniversario,

con miedo y con prevención 

nos acercamos al blog,

perplejos con emoción.

 

En este blog encontramos

aquella infancia perdida

y también la adolescencia,

en los años transcurridos 

entre Villava y León.

Se me quedaron los ojos

haciéndome chiribitas,

como dicen en mi pueblo, 

sumidos en la sorpresa

de reencontrar los recuerdos

que daba yo por perdidos

¿Fue verdad todo este tiempo,

transcurrido entre Villava

y la Virgen del Camino,

del Camino de León?

¿Los frailes y los alumnos

están desaparecidos,

el colegio y santuario

son recuerdos diluidos?

¿Dónde están los compañeros,

dónde los profesores,

y dónde aquellos paisajes

de los campos parameros?

¿Todo será un espejismo?

Y aunque no nos olvidamos,

lo dejamos arrumbado,

en el fondo del baúl,

del baúl de los recuerdos.

 

Por arte de birlibirloque, 

por magia de José Mari, 

y dicho el abra cadabra 

hemos vuelto a recordar 

y poder reconstruir

esa etapa que pasamos 

en la Virgen del Camino, 

del Camino de León.

Escuelas Mayor, Menor,

las capillas y mosaicos,

Padre Domingo Iturgaiz.

La Virgen en la Menor, 

protegidos con su manto,

Director Padre Del Cura. 

Jesucristo en la Mayor, 

dándonos su bendición,

Director el Padre Pedro.

La misa el Santo Rosario, 

rezos y meditación,

viacrucis estaciones, 

ángelus, exposición. 

En dos filas ordenados

a la derecha y la izquierda 

del largo pasillo encerado

por tranvías en acción.

.

Todo el día en procesión.

del dormitorio a la clase,

de la clase a la capilla,

del estudio al comedor, 

recreación, camarilla,

del teatro a la piscina,

embutido el albornoz

para hacernos aguadillas, 

para no pasar calor

y divertirse un montón. 

 

FIN DE LA PRIMERA PARTE.

 


10 comentarios:

Ramón Hernández dijo...

La verdad es que me pierdo y diluyo en tan detallista y meliflua contemplación, amigo Cirauqui, pues me parece que algún mago te ha dado el poder no solo de detener, sino también de rebobinar el tiempo. Vendrán dos partes más, y aún me perderé y diluiré más, sobre todo en mi empeño empecinado de proyectar el pasado en el futuro, lo que, bien entendido, significa un intento serio no solo de revivirlo, sino también de mejorarlo. Y, como es obvio que todos volvemos a ser niños en algún momento de la edad provecta (yo, desde luego, ya lo soy desde hace mucho tiempo, si es que dejé de serlo alguna vez), todos tendremos la oportunidad de revivirlo mejorándolo, es decir, de ser cada vez más niños, de esos niños evangélicos que entrarán, que duda cabe, en el reino de los cielos. Afortunadamente, ya han pasado los tiempos en que las filípicas más desconsideradas y demoledoras se echaban en los templos a los mejores católicos, a los "practicantes", a los que iban a misa. Todavía me viene a la mente la imagen de Segis, mi admirado y venerado paisano por tantas razones, queriendo convertir a Dios en unos ejercicios espirituales a toda una capilla de fervorosos apostólicos, imagen que no puedo menos de asociar con la del que luego sería "Pepe Domingo Castaño", levantándose para decir: "yo me convertiré a Dios", como ya he contado aquí posiblemente más de una vez. Gracias, Cirauqui, gracias, Josemari, por ayudarnos a realizar un ejercicio tan sano como el de volver a ser niños.

Oscar Fernández dijo...

Javier, gracias por tus recuerdos

JOSÉ MANUEL GARCÍA VALDÉS dijo...

Uno de la promocionona que lo borda. Tenemos dos Franciscos Javieres que, además de escribir bien, son dos memorias con patas, tal cual. Si alguno quiere comprobarlo que pregunta por el día y la hora en la que el P. Enrique le sacudió un par de guantazos, lo saben.
D. Fco. Javier, siga Vd. con esa buena pluma, de escribir, y esa memoriona. Sois un seguro de continuidad vital.
Abrazos.
P.D. Algo cambió en el blog, ayer apenas se podía leer lo escrito y hoy se ha recuperado el tamaño, algo tendrá que ver el homenajeado, claro que para eso se le paga.

Francisco Javier Cirauqui Armendariz dijo...

Ramón:

Seguro que la gente que estuvo conmigo se acuerda perfectamente de las cosas que cuento. Tengo buena memoria y recuerdo el colegio y sus gentes con verdadero amor y cariño con sus momentos felices y sus momentos infelices.
Por supuesto que no me he quedado anclado en mi infancia o adolescencia, quiera o no quiera las cosas han cambiado mucho. Siempre he sido muy realista.
Para mí el futuro está en que después de tanto tiempo y por obra de José Mari y por todos los que participaron en el encuentro nos hayamos vuelto a juntar y a sentirnos unidos. Hubo tiempos mejores en el blog, pero me alegró mucho ver, aún, tanta gente en este encuentro. Esperemos que podamos seguir unidos, mientras el cuerpo aguante y en torno al blog, seguir recordando el colegio y la vida que en él vivimos. No como nostalgia, sino como realidad y experiencia que nos lleve a mejorar nuestra vida.

Gracias por tu comentario, Ramón.

Francisco Javier Cirauqui Armendariz dijo...

Oskar, Gracias por leerme. Un fuerte abrazo.

Francisco Javier Cirauqui Armendariz dijo...

Gracias, José Manuel , por tus elogio. Me gusta mucho cuando leeis mis escritos con interés.
Que viva la promocionona y todos los demás. Un fuerte abrazo.

José Ignacio dijo...

`

Gracias,Javier, por volver a recordarnos que fuimos niños y niños buenos.


Vibot dijo...

Gracias Cirauqui.
"Recuperar la certeza / de todo lo que vivimos" dices… y me gusta cómo lo has dicho.
Sí, aunque algunas cosas fueron tan inciertas que aún siguen como flotando en aquellos páramos de cristal, golfos de niebla, que acuñó Calderón.
Certezas.
Sfumatos…

¡Do iremos a buscallas!

Francisco Javier Cirauqui Armendariz dijo...

José Ignacio:

Solo he pretendido traer un recuerdo de nuestra infancia y adolescencia en la Virgen del Camino, que por lo menos, con el blog conseguimos encontrar a algunos de los compañeros del Colegio. Gracias por tu lectura.

Francisco Javier Cirauqui Armendariz dijo...

Vibot:

Yo me refiero a la certeza de que existió el colegio y los compañeros, porque hubo épocas que me pareció un mal sueño. Aún hay muchas cosas que siguen inciertas y flotando, como dices, en aquellos páramos de cristal y envueltos en la niebla y en la duda, sin certezas.

Un fuerte abrazo

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