ENLACES DE LA CABECERA
sábado, 11 de octubre de 2025
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
ENTRADA MÁS RECIENTE
LAS TRES ENTRADAS MÁS POPULARES EN EL BLOG
-
PRÓLOGO de Eugenio Cascón (*) Creo que conocí a Mariano Estrada hace muchos años, tanto como los transcurridos desde la primera mitad de los...
-
“ El nuestru libru de Griego viene ahora de viaje para acá. Está regresando”. Así empezaba a escribir yo esta crónica en los últimos días ...
-
El pasado 29 de mayo, al término de la Santa Misa dominical, tuvo lugar en la Capilla de Santa Nonia un pequeño acto de homenaje y reconocim...


14 comentarios:
¡Madre mía y Dios mío¡
18 años ya. Recuerdo los comentarios nada más finalizar el Re-encuentro: ¿ Y ahora qué? ¿Se repetirá esto? ¿Seguiremos en contacto? ¿Cuándo será el próximo? A ver si nos llamamos…
Y resultó que gracias a esta criatura, y a su padre Josemari, quien ya después de 18 años ha alcanzado la graduación de Capitán General dejando atrás la de Furriel que tanto echa de menos, hemos vuelto a repetir Re-encuentros, mini Re-encuentros, celebraciones, cumpleaños, onomásticas, comidas, cenas..y desgraciadamente también tristes despedidas a aquellos que se nos fueron, antes y después de estos Felices 18 años que disfrutamos con ellos.
Nos hemos descubierto entre nosotros, nos abrimos como un libro abierto quizá para demostrarnos a nosotros mismos y ante los demás cómo éramos y somos realmente, sin dobleces, sin nada que ocultar.
El “Por qué”. ¿Cuántas veces, verdad, nos hemos hecho esta pregunta? ¿Gracias a qué o a quién?
No hay una causa concreta. Hay varias, muchas, que confluyen en unas sola: Que nos criamos como en una gran familia, que nos educaron, o al menos lo intentaron pero también nosotros contribuimos poniendo nuestro granito de arena, como en una gran familia, que bebimos de las mismas fuentes y que lo malo lo supimos transformar en positivo. En definitiva, que vivimos en un universo diferente al que teníamos más allá de la cancela y Pepe Colinas. Posiblemente porque estábamos encapsulados pero había motivos para compensar el encierro e incluso la falta de la vocación porque, seguro, muchos de nosotros ya teníamos claro que vestir hábitos no haría el monje. Humanidades, mucho compañerismo, mucho estudio, mucha cultura, mucho deporte, mucha música, mucho teatro, mucho cine, mucha piscina compensó con creces mucha vuelta a la finca, mucha disciplina absurda, muchas Misas…
A mi, la Mili no me hizo un hombre. El Colegio, me hizo un hombre y me formó en valores de los que presumo y trato de inculcar y transmitir.
Que tengáis un buen Domingo y que pronto nos volvamos a ver para celebrar algo, cualquier cosa, por cualquier motivo.
Y yo, amigo LH, que soy un hijo fuera borda o a destiempo o extra uterino, por así decirlo, de este gran grupo fraternal, familiar, casi todavía recién nacido, suscribo íntegramente tu sentir y tu pensar. No son los valores que dices, sino una forma de vida cimentada en valores, positiva, emprendedora, enriquecedora, lo que os unió y me unió a vosotros tras haber vivido yo en Corias una experiencia no similar sino igual a la vuestra. Hoy, por lo que veo, el blog, o más bien quienes lo formamos, permanece encendido en sus cenizas, pero hay mucha yesca que quemar todavía a su alrededor y en sus entrañas, por más que sus músculos se vayan aflojando y sus neuronas, adormilando. Fijaos en la fiesta de hoy, la de la Hispanidad, que lleva ahí, vivita y coleando, ya algunos siglos y, aunque un tanto aletargada en estos tiempos, los peligros evidentes la están despertando afortunadamente de nuevo para que todo español de buena voluntad y sentido común vuelva a sentirse orgulloso de serlo. Brindaré hoy por esa maravillosa hispanidad, que tanto compartió con tantos pueblos, y brindo por la mayoría de edad de un blog al que, si bien ya ha compartido mucho, todavía le queda mucho por compartir antes de ir al notario para hacer testamento.
Da melancolía recordar lo "jóvenes" que aún estábamos hace 18 años. Y la ilusión con que acudimos a aquel inesperado reencuentro después de tanta vida. Todo el agradecimiento es poco hasta hoy mismo al grupo de León que lo ideó y propició. Había demasiadas horas recostadas entre el humo dormido de los años, demasiados afectos truncados -sobre todo aquel amor sublime e inefable que yo hubiera querido pronunciar por vez primera después de tanto tiempo, pero que no acudió tampoco aquellos días- demasiados paseos conversados y deportes radiantes y piscinas y músicas y cines y teatro excelsos… Y siempre los habrá, como un tesoro de tiempo irradiante.
Fue muy hermoso volvernos a encontrar.
Tienes razón Vivot: fue muy hermoso y muy triste hoy.
¿Quién eres?
Manifiéstate, Anónimo, y si no te maniestas no calles para siempre. Sigue manifestándote tal como eres aunque seas Anónimo. Vibot lo pregunta para saber realmente a qué te refieres por "y muy triste hoy". Aquel amor sublime e inefable que Vibot hubiera querido pronunciar por primera vez ( y yo) después de tanto tiempo pero que no acudió tampoco aquellos días, es uno de los tesoros de tiempo irradiante que supimos convertir en presencia con su recuerdo. Y sigue con nosotros. La herida se cierra pero la cicatriz perdura para siempre pero ya no sentimos tanto dolor ni tristeza que nos hunda.
Ya se me nota la mayoría de edad y me recordó Vibot que agradecer al Grupo de León su encomiable labor en reunirnos a todos es de obligado cumplimiento y no tuvo parangón. O sea, como Maxi Trapero en topónimos, el Grupo de León en organización.
La flor se marchita, el fuego se apaga, el sol se oculta y, como no, el blog envejece y, quizás, muera. Aquel calorín de los primeros encuentros y los primeros escritos se ha venido abajo. Es un poco triste reconocerlo pero "colorín colorado, este cuento, casi se ha acabado". Ah, se siente. Que no, pues a trabajar.
Abrazos con cierto pesimismo.
Celebro el pesimismo optimista de JM, capaz de rehacer Gaza por sí solo o de reedificar una ciudad entera tras el paso de un tsunami. Gracias, querido amigo JM, pues tu humor es cerilla dispeusta al rasca desencadenante de la fiesta en torno a esta hoguera fraternal nuestra. Solo falta un poco de yesca alrededor para que arda Roma con Santiago, Dios me perdone por mentar la soga en casa del ahorcado. Mi sentir y presentir es que ni Sansón podrá con las columnas de este blog que formáis tú y, por lo menos, media docena más. Gracias, amigo, con fundado optimismo.
Eso lo dices escondido bajo el anonimato, si no fuera por eso ya te habría puesto una "demandona". Creo que tú escribes derecho sobre líneas torcidas. Más abrazos. Y, por favor, si no quieres que te critiquen, sal a luz como un hombre, con nombre y apellidos, o no.
Disculpa, JM, que en el comentario anterior se me olvidara rellenar el URL. Desde luego, entre el anónimo y yo no llegamos al kilo ni valemos un comino, pero hacemos bulto, incordiamos y damos guerra, que algo es algo.
Ramón, no te infravalores, llegas a la tonelada, yo ando por el comino. Mucho ánimo.
Los dos sois el sabrosísimo comino que adoba este buen guiso.
Y tú, Vibot, la guinda más dulce del guiso.
Saludos.
Publicar un comentario