miércoles, 30 de octubre de 2024

SUBIRACHS EN SANTA CRUZ DE TENERIFE

 Os contaré que hemos pasado unos días en Santa Cruz de Tenerife. Mis Isabel y Alberto necesitan, de cuando en vez, un chute intenso de familia y de mar.




Dando un paseo por el parque García Sanabria de Santa Cruz me sigue impresionando la obra que allí permanece de Josep María Subirachs y que tituló como INTROVERSIÓN.

Recuerdo que cuando vivíamos allí, cada vez que pasaba delante de su escultura me iba de vuelta al Santuario de la Virgen del Camino.

Esta obra fue la aportación de Subirachs a la Exposición Internacional de escultura en la calle que tuvo lugar en Santa Cruz en diciembre de 1973 y enero del 74.



En ella participaron 43 artistas de talla internacional que, para el disfrute de quienes allí vivíamos, expusieron sus obras fuera de los espacios museísticos, muchas de ellas se han quedado definitivamente en las calles, plazas y parques de la ciudad hasta el día de hoy. En el interior del Parque García Sanabria permanecen  13 de  aquellas esculturas.

2 comentarios:

Ramón Hernández dijo...

Bien hecho, Josemari, y, seguro, bien disfrutado. También la mano de Subirachs parece estar necesitando un "chute" de aire y luz, emergiendo, como parece, generosa y amistosa, de la enorme masa de hormigón que la aprisiona. No sé absolutmente nada sobre el simbolismo con que la concibió su autor y con el que la recibió el público, pero lo dicho podría ser un simbolismo más para los afortunados lugareños que la contemplan a diario, para los turistas que buscan bellezas y para cuantos van por la vida con la mano tendida y abierta, creando lazos y derrochando bondades, justo lo que todos estamos haciendo estos fatales días con los valencianos. Acabo de saber por Baldo que esta mañana ha muerto en La Virgen del Camino fray Ramiro, santo varón que ha pasado por la vida con la mano tendida y abierta, y que ahora vuela ya libre de ataduras, sin el peso de tanto hormigón opresor.

Vibot dijo...

"…un chute intenso de familia y mar…": que bien lo muestran Isabel y Alberto cogidos del meñique con sus cuerpos abiertos como flores. Isabel sonriéndote y Alberto seriecito, haciéndose el galán, que lo es. Con sus ropas perfectamente conjuntadas y uno de sus pies posado relajadamente sobre las cálidas maderas de un paseo marítimo a mí me hacen llegar la brisa azul y blanca de ese mar musical que esparce aromas frescos y bulla de gaviotas… y la más delicada y acogedora harmonía amorosa de esta familia que es también la nuestra después de estos casi 18 años que yo veo encuadrados en esa ventana a las lejanías desde la que nos miran también a nosotros.
Y esa mano clamorosa de Subirachs como grabada a fuego en el hormigón, esos volúmenes que se curvan y enmarcan y sostienen, cimentando un mensaje misterioso y cercano dicen tanto de todo lo que vivimos desde entonces…
Gracias enormes, querido Josemari, por tanta generosa lealtad. Gracias Isabel, por sostenerle y arrullarle siempre. Gracias Alberto, por quererlos tanto a los dos; y también a nosotros. Esto ya es para siempre, lo sabemos.

ENTRADA MÁS RECIENTE

EN PLENA CONSTRUCCIÓN

LAS TRES ENTRADAS MÁS POPULARES EN EL BLOG